Aparte de tener algunas de las mejores pistas de esquí del Pirineo, cuando la nieve se funde Andorra se convierte en un paraíso también del trekking, con montones de senderos que recorren prados alpinos, lagos de origen glaciar y picos que rondan los 3000 metros.
Andorra es un país que conozco bien y que he pateado bastante. En este artículo te hablo de los que creo que son los 5 trekkings imprescindibles de Andorra. Si vienes unos días a Andorra y es tu primera vez en el país de los Pirineos, empieza con estos trekkings. No tienes excusa, porque hay para todos los niveles, pero empezaré por los más difíciles.
Pic de Comapedrosa
Con 2945 metros de altitud, el Comapedrosa es la cima más alta de Andorra, y por ello es una de las rutas más populares del país, a pesar de ser una ruta exigente, que transcurre por terreno de alta montaña y con un gran desnivel.
La ruta clásica de ida y vuelta tiene una longitud de 14,3 km, un desnivel acumulado de 1.380m y una duración de unas 6 horas. Pero hay una variante más completa pero bastante más dura, que asciende por el lado del Pla de l’Estany y a través de una enorme tartera hasta el collado de Malhivern. Desde allí, acometemos la subida final al Comapedrosa, descendiendo después por el valle homónimo de regreso al punto de inicio.

Es un trekking circular que calificaría de difícil por la duración y la exigencia física, aunque sin mucha complicación técnica, más allá de prestar atención para no perder los hitos y marcas en el collado de Malhivern. Este collado es el tramo más pesado y duro del trekking, pero el esfuerzo se compensa con las vistas que tenemos en el Comapedrosa, que abarcan buena parte del Pirineo, divisando la Pica d’Estats y hasta el Aneto.
Lagos de Tristaina
Clásica excursión familiar de Andorra, una ruta circular de unos 4 kilómetros con un nivel de dificultad bajo y apta para cualquier persona, aunque puede adaptarse y extenderse en función del nivel, con variantes como el pico de Tristaina o la ascensión a pie al Mirador Solar de Tristaina, una de las atracciones de la zona desde que se inauguró en 2021.

El inicio «oficial» del trekking es el aparcamiento de la Coma, uno de los sectores de la estación de esquí de Ordino Arcalís. El restaurante del mismo nombre, que en invierno solo es accesible con esquís, queda accesible por carretera en cuanto cierra la estación, momento en el que las máquinas quitanieves liberan la carretera que llega hasta aquí. No obstante, en verano el tráfico está regulado, lo que obliga a pagar para tomar el Telecabina o empezar la ruta en el parking de la base de la estación, lo que añade 40 minutos de recorrido.
Tras una primera subida decidida y pronunciada, el camino se suaviza justo al llegar al primero de los lagos, y desde aquí el sendero va prácticamente llaneando, recorriendo las orillas de los Estany Mig y el Més Amunt. El sendero transita por el característico paisaje pirenaico, formado de praderas alpinas, formaciones rocosas, torrentes, lagos y picos próximos a los 3.000 metros.
Mi propuesta de ruta por los lagos de Tristaina culmina en la subida al Mirador solar, una pasarela suspendida en el aire con vistas espectaculares en 360º que abarcan el macizo de montañas de la Pica d’Estats al norte, el Parque Natural del Sorteny al este y las pistas de Ordino Arcalís al sur.

Port de Siguer y Estany Blau
El trekking menos conocido de los cinco que te comparto en este artículo, pero no por ello menos recomendable. De hecho, fue una muy agradable sorpresa, una excursión que hice en un día improvisado y buscando sitios nuevos por donde nunca había ido, y se ha acabado convirtiendo en uno de mis preferidos de Andorra.
Supe de él a través de la web oficial de turismo de Andorra. Como puedes ver es una ruta, a priori, no muy bestia: son casi 10 Km (ida y vuelta) con un desnivel acumulado de unos 700 metros, pero engaña bastante, pues aunque los datos no hacen presagiar nada extraordinario, no deja de ser una ruta por terreno de alta montaña y con tramos de pronunciada pendiente que son exigentes físicamente.

El último tramo también puede tener complicación dependiendo de la época del año en la que lo hagas. En mi caso, a finales de Mayo, aún quedaban numerosos neveros en la parte final de la ruta, lo que me obligó a extremar las precauciones e ir más despacio. A partir de Julio y hasta Noviembre no creo que plantee demasiados problemas, pero en años donde en invierno haya nevado bastante, es muy probable que aún quede nieve hasta bien entrado Junio.
En cualquier caso, y como digo, es una ruta preciosa y muy variada para lo corta que es: un primer tramo por el bosque deja paso, casi de forma repentina, a prados alpinos en otro valle moldeado por la acción glaciar. Superado el puerto y ya en territorio francés, hay que descender un poco hasta el Etang Blau, en un fantástico entorno de alta montaña.

Lagos de Pessons
La ruta circular de los lagos de Pessons es la otra ruta clásica de Andorra junto a la de Tristaina. Como aquella, la de Pessons te pone inmediatamente en un entorno de alta montaña, en un circo de origen glaciar moteado por pequeños lagos e ibones alimentados por riachuelos y torrentes que serpentean los prados. Un entorno idílico.
Esta ruta comienza en la zona de Grau Roig, sector de la estación de esquí de Grandvalira. En concreto, en el parking de Cubil, donde hay que subir inicialmente por una pista forestal (que en invierno es pista de esquí) en dirección oeste, siguiendo las indicaciones del restaurante Refugi dels Llacs de Pessons, a orillas del primer lago, llamado Primer.

El sendero continúa en ascenso hacia los lagos superiores, como el Estany Forcat o el Estany de les Fonts. Pasado este, el último lago es el del cap de Pessons, desde se enfila la subida a la collada de Pessons. Una opción para alargar la ruta es crestear desde esta collada hasta el Pic de Montmalús, descendiendo por el valle del mismo nombre, aunque esta es una ruta mucho más dura y exigente.
Poco antes del Estany de les Fonts encontrarás un cartel que indica el camino de vuelta para la ruta circular, descendiendo por los que se conocen como lagos de la Solana, a través de un valle paralelo al de Pessons que te devuelve en un descenso muy cómodo al lago Primer. La ruta completa tiene una longitud aproximada de 8 km, con un desnivel acumulado de unos 450 metros, y se tarda en hacer entre 3 y 4 horas.
Vall d’Incles
El Vall d’Incles es un apacible e idílico valle, para algunos el más bonito de Andorra. Un sendero, el camí Obac, se adentra unos 3 Km por el valle y al lado del río, en un paseo tranquilo apto para todos los públicos.

Si buscas algo más de tralla hay algunas variantes para hacer rutas circulares con algo más de miga, como la de los Estanys de Juclar, aunque la más completa y cañera es la de Cabana Sorda y Estany Enrodat, ruta que te lleva por la parte superior del valle y que te ofrece espléndidas vistas del entorno.
Esta ruta empieza en los apartamentos que se encuentran al comienzo de la Vall d’Incles, donde deberemos haber dejado el coche (lamentablemente, el parking es de pago). Se camina primero por la carretera, apenas un kilómetro, hasta que un desvío a la izquierda inicia una subida exigente a través del Bosc de la Pinosa. Tras media hora de ascenso el bosque se abre y el paisaje se transforma en un entorno de alta montaña.

Pasaremos por el Estany de Cabana Sorda y un refugio (no guardado) del mismo nombre. Desde allí, y en dirección norte, caminamos al borde de una terraza natural que ofrece una panorámica espléndida de todo el valle, antes de iniciar un descenso suave en su primera parte hasta el Estany d’Anrodat, y más pronunciado y decidido a partir de aquí, hasta llegar al pont de la Baladosa, donde conectamos de nuevo con la carretera. Para no volver por la misma carretera, lo mejor es cruzar el río y tomar el ya mencionado camí de l’Obac, que serpentea entre claros y sombras hasta devolvernos al lugar de inicio.