San Francisco, como Los Angeles, suele ser el punto de inicio o punto final en un road trip por la costa oeste, según cómo planifiques el viaje. Pero si eres como yo, que prefieres dedicarles más tiempo a los parques nacionales y sitios de naturaleza, y menos a las ciudades, es probable que te estés preguntando cuántos días dedicarle a San Francisco.
Esto es lo que me plantee yo al planificar mi viaje. Mi apuesta fue la de visitar San Francisco en un solo día, y te puedo decir que es algo totalmente factible. En este artículo te cuento qué pude ver y cómo puedes moverte para encajarlo todo en una única jornada.
Por la mañana: Chinatown, Distrito Financiero y Fisherman’s Wharf
Lo mejor es empezar por el mítico Chinatown; está cerca del centro y casi seguro que lo tendrás a tiro de piedra de tu alojamiento.
Una buena forma de recorrer Chinatown es con un Free Tour; todas las agencias de Free Tour en San Francisco tienen como recorrido estrella Chinatown, finalizando en el Distrito Financiero (están uno al lado del otro). Con el Free Tour ahorrarás tiempo, ya que te llevan a los puntos clave y podrás conocer más detalles sobre la historia de este barrio.
Si decides recorrerlo por tu cuenta, debes saber que el recorrido clásico comienza en la Puerta de Dragón (Dragon Gate), la entrada icónica de Chinatown en la intersección de Grant Avenue y Bush Street.
Tras hacerte la foto de rigor, sigue por Grant Avenue, la principal calle comercial de Chinatown, con todo tipo de tiendas y restaurantes de lo más variopintos. De Gran Avenue se ramifican algunas callejuelas estrechas, las más famosas Ross Alley, con la famosa tienda de las galletas de la fortuna, y Waverly Place, conocida por sus tiendas de hierbas medicinales y de antigüedades.
Es habitual acabar el recorrido en Portsmouth Square, el corazón histórico de Chinatown, un lugar perfecto para descansar y disfrutar del ambiente, con gente jugando al ajedrez, practicando tai chi o simplemente disfrutando del día.
Quizás quieras incluir en el recorrido el Museo de la Diáspora China, en el 965 de Clay Street. Este museo ofrece exhibiciones sobre la historia china en Estados Unidos y el origen de este famoso barrio, que recordemos se trata de la mayor comunidad china fuera del país asiático.
Si terminas cerca del mediodía, puedes aprovechar para comer en alguno de los muchos restaurantes de Chinatown, y degustar el famoso dim sum, pero mi opción fue reservarme la comida para más tarde, y lo que hice fue ir desde Portsmouth Square al Distrito Financiero, ya que queda muy cerca, caminando al este hacia Market Street, una de las principales arterias de San Francisco, con todas las tiendas de tecnología, cafés modernos y restaurantes de moda de San Francisco.
Cerca queda el famoso edificio Transamerica Pyramid, el rascacielos más reconocible de San Francisco. Comprueba en el momento si puedes subir, pues en el momento que yo lo visité no se podía por obras.
En el inicio de Market Street se encuentra el Ferry Building, edificio histórico que hoy día también alberga un mercado de alimentos gourmet. Desde aquí puedes ir caminando o en transporte público hacia los famosos Piers, los embarcaderos, como el Pier 39, famoso por los leones marinos que suelen descansar en los muelles cercanos.
Sin embargo, te aconsejo prescindir de esta visita y caminar por Market Street hasta Union Square. De aquí parten los legendarios Cable Cars, medio de transporte que no solo es un ícono de la ciudad sino también una manera práctica de moverte en transporte por San Francisco.
Una de las líneas más concurridas de los Cable Cars es la que lleva a Fisherman’s Warf, subiendo por las calles Powell y Mason, así que es una buena idea coger uno de los cables para visitar este animado embarcadero del norte de San Francisco.
Antes, pero, puedes hacer una parada en Lombard St, la famosa calle con sus curvas cerradas, y que queda muy cerca de Fisherman’s Warf. Tras echar un par de fotos y subir Lombard, puedes dirigirte ya a Fisherman’s Warf y degustar el famoso Clam Chowder, plato típico de los muelles de San Francisco y, por eso, lo verás en todos los restaurantes, incluso en cafeterías, así que no tendrás problemas en encontrar un sitio donde probar esta sopa que, he de confesar, estaba mucho más buena de lo que pensaba.
Por la tarde: Golden Gate y Painted Ladies
Desde Fisherman’s Warf no hay un transporte directo que te lleve al Golden Gate, pero caminando apenas 20 minutos hacia el oeste puedes coger el autobús de la línea 28, que te lleva hasta Golden Gate Bridge Plaza, donde está el centro de visitantes, un café y un restaurante.
Desde aquí, simplemente puedes caminar por el puente hasta que te canses. Lo cierto es que caminar por el puente tiene gracia un rato, pero no mucho más, así que con 20 minutos de caminar de ida, más otros 20 de vuelta, más las fotos que eches en la plaza, ya tendrás hecha la visita.
Para volver tienes que coger este mismo autobús de la línea 28, y en el cruce de las calles Presidio y Balboa haces transbordo para coger la línea 31, que te deja cerca de Alamo Square y las Painted Ladies, otra de las atracciones de San Francisco. Este es un buen momento para fotografiar el atardecer, con las famosas casas pintadas y los rascacielos del Distrito Financiero al fondo, y de dar por concluido el recorrido de un día por San Francisco.
¿Qué más ver en San Francisco si tienes 2 o 3 días?
Con dos días ya puedes plantearte ver otros atractivos de San Francisco. Por ejemplo, puedes acercarte a Muir Woods para admirar las majestuosas secuoyas costeras rojas. Está a tan solo unos minutos al norte, fuera del bullicio de la ciudad. Puedes que cruzarás el Golden Gate para tomar una perspectiva distinta y echar fotos desde el mirador Battery Spencer, probablemente el más popular (la foto de portada de este artículo está tomada desde allí).
De regreso a la ciudad puedes plantearte subir a Twin Peaks, dos colinas casi gemelas que ofrecen vistas panorámicas sobre toda la ciudad y la bahía, o también dedicar unas horas a pasear por algunos barrios emblemáticos como Haight-Ashbury, cuna del movimiento hippie; Mission District, conocido por su vibrante arte callejero; o Castro, famoso por su activismo LGBT+.
Con tres días entonces tienes una visita obligada a Alcatraz, la famosa cárcel situada en un islote en medio de la bahía de San Francisco, y donde estuvo encerrado Al Capone y donde tuvo lugar la histórica fuga de Alcatraz, llevada a cabo por Frank Morris y los hermanos Anglin.